El título es para recordar que allí sobreviven personas con las mismas necesidades que cualquier ser humano y bien digo sobreviven porque las necesidades mínimas no son satisfechas. Sin agua potable, sin alimentos y sin una vivienda digna.
Se trata de la localidad de Ibarreta en Formosa donde se ha detectado 28 menores desnutridos. La enfermera Miriam Uro que atiende a los niños y un médico que prefirió no dar su nombre.
Según la enfermera, el problema de la falta de alimentos no es el único inconveniente de los niños de las colonias Pilagá y Toba. "Hay chicos que sufren de varicela y, por las malas condiciones del agua, muchos tienen diarrea y sufren vómitos", sostuvo Uro.
Aunque la gente solidaria hace donaciones de alimentos esa no es la solución ahí hay que hacer un trabajo importante con un equipo de gente que intervenga en salud, educación, trabajo, vivienda.
La gobernación de Formosa hace oídos sordos y cuidado porque no les permiten hablar de "desnutrición", sino tienen que hablar de problemas de "bajo peso". A ésto le llamo yo tapar el Sol con la mano.
A las colonias Pilagá y Toba llegan los programas Remediar, que dependen del Ministerio de Salud de la Nación, y Nutrir Más, que es financiado por el Ministerio de Desarrollo de la Nación, pero "No llega como debería", afirmó Uro.
Señores gobernadores ustedes son los responsables de este crimen y sí digo bien, crimen es dejar abandonada a la gente de vuestra provincia que también es Argentina.
Fuente: La Nacion
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