domingo, 7 de marzo de 2010

LOS DESASTRES DESPIERTAN CORAZONES

La periodista se acerca a entrevistar a un hombre muy joven no más de treinta y cinco años estaba con ropa de trabajo ayudando a sacar escombro en una calle que estaban todas las viviendas en el suelo, por el terremoto y enseguida el maremoto que se llevo el mar una cuarta parte del pueblo, esto en Constitución, un balneario precioso mitad campo mitad playas con muchos Chalecitos y cabañas a orillas del mar donde cada verano se repleta de turistas que vienen a disfrutar la tranquilidad del campo y la maravilla de playas donde habitualmente los Surfistas hacen sus acrobacias deleitando a los veraneantes.

La periodista le pregunta.

_ ¿Hola amigo! ¿Cómo te llamas?

_ Patricio, mi apellido no importa

_ ¿Vives acá? ¿Por qué estas ayudando?

_ Bueno mira acompáñame, ¿Ves esa casa la mitad en el suelo? A orillas del mar y el río, bueno esa era mi casa. ¿Ves esa otra más allá casi nueva? Esa era la casa de mis padres y ¿Mira esa otra que tiene todo el techo en suelo y no hay ventanas ni puertas y esta ladeada hacia la derecha? Esa era la casa de mi hermana con su marido y dos niños de seis y cuatro años – el hombre se emociona y llora pero trata de contener las lágrimas. Lo perdí todo con mi familia.
La periodista se emociona y le corre una lágrima por su mejilla, le dice

_ ¡Pero ¿Cómo estás ayudando si deberías estar junto a los damnificados en un albergue con tu familia?

_Mira, yo nací aquí, me eduqué en un colegio que también está en el suelo, estos son mis vecinos de toda mi vida, me encontré con un viejo abuelo que lo conocía pero nunca lo saludé en mi vida y me dio tanta alegría verlo vivo, venía todo embarrado, mojado y corrí a abrazarlo ¡Estaba vivo, me puse feliz por él! Y antes nunca lo había saludado siquiera, este terremoto me enseño que mis vecinos son hermanos de mi país ¿Y quién soy yo para no ser su amigo? ¿Quién para no ser amable con todos mis vecinos? En este país cuando comenzamos a crecer económicamente, empezamos a vivir en nuestro metro cuadrado y nos alejamos humanamente de los nuestros porque son parte de nuestro paisaje diario.

Y al final, estoy vivo con mi señora y mi hijo, mis padres y mi hermana con su marido y mis sobrinos ¡Eso es lo que le doy gracias a Dios! Estamos vivos- vuelve a llorar y contener- ¡No tengo nada material! ¡Pero qué importa si estamos con nuestras manos buenas para ayudar a levantar a mi país! Necesito de todo, nos quedamos con lo puesto, duele mucho _ sollozando_ Pero puedo abrazar a toda mi familia que es muy bueno, muchos de ellos – Le muestra a personas errantes por la playa buscando a sus seres queridos.- ellos se quedaron sin quien los abrazara, por eso estoy ayudando.

En ese momento llega Claudio solo en calzoncillos y una polera, se abrazan con Patricio, lloran.

_¡¡Viejo perro!! ¡¡Estamos vivos!! ¡¡Somos muy afortunados amigo querido!! Vamos a ayudar, hay tanto que hacer Patito mi viejo perro.

La periodista sacó un pañuelo y lloró, se abrazó a los dos y no pudo terminar su entrevista, Patricio y Claudio se fueron ayudar a levantar a Chile.

Info: http://redescritoresdecoquimbo.ning.com/group/terremotoenchilenoticias/forum/topic/show?id=3517267%3ATopic%3A26482&xg_source=msg_group_disc.

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